Claves para poder comunicarnos con extraterrestres y nosotros mismos

¿Nos entenderíamos con extraterrestres?

En una entrega anterior platiqué sobre si seríamos capaces de entendernos con extraterrestres (suponiendo con alguna inteligencia igual o más elevada a la nuestra), la respuesta más probable, con las herramientas con las que contamos hoy en día a nivel de conciencia, es NO.

Como decía, lo más importante es que las siguientes recomendaciones no solo aumentarían exponencialmente el poder comunicarnos de manera funcional en entendimiento con alguna vida inteligente fuera de nuestro planeta, sino también como especie, lo cual es más importante de momento porque hoy somos todo lo que conocemos.

El primer paso: Conócete a ti mismo. En la antigua Grecia, en la entrada del Templo de Delfos, había una inscripción cuya parte central decía: “Conócete a ti mismo y conocerás el universo y a los dioses”. Es importante saber reconocer lo que me pertenece, lo que es generado por mí, lo que se ve reflejado por mis pensamientos, palabras y acciones. Pero es mucho más profundo que eso, puesto que es importante reconocer de dónde se originan esos pensamientos de mi YO. Si sé reconocer lo que soy y por qué lo soy, es mucho más fácil saber diferenciar entre lo que es real y lo que no lo es (lo que es racional y lo que es irracional).

Un ejemplo de esto es que un extraterrestre está intentando entablar comunicación, nos da una palabra suya, y lingüistas definen que puede significar “instrumento”, llegan a esa conclusión debido a que una palabra tiene un contexto, así como un intento de explicación con semejanzas acorde a lo que conocemos. Instrumento tiene varios sinónimos: utensilio, aparato, artefacto, medio, método, técnica y arma. Imaginemos que el lingüista es militar, acorde a su historia de vida, personalidad y a lo que está acostumbrado lidiar diariamente con el trabajo en el uso de rifles y otras armas de guerra. Tiene mayor probabilidad que dé por hecho que la palabra significa “arma” en un sentido bélico. Conclusión que estaría basada por lo que él conoce y ha vivido. Por ello, es importante conocerse a sí mismo, nos da mayor objetividad y humildad para reconocer lo que interpreto con base a mis propios miedos y mi propio ego (que es lo que frecuentemente ocurre en el ser humano).

El segundo paso: Manejar los pensamientos y convertirlos de irracionales a racionales. Ya que los irracionales solo nos llevan a suponer, interpretar, son auto-derrotistas, “horrorizan” y “absolutizan”. Como en el ejemplo de la palabra “instrumento” uno puede interpretarlo de inmediato como “arma” (bélica) sin haber analizado antes la situación.

Los pensamientos racionales son aquellos que:

1. Tienen lógica

2. Tienen base en la realidad

3. Son prácticos (nos ayudan a resolver problemas)

4. Sociales (nos ayudan a relacionarnos con los demás)

5. Y reducen las emociones negativas (ansiedad, tristeza, enojo, etc.)

El tercer paso: Asertividad. Es la habilidad aprendida para expresar nuestros sentimientos y preferencias sin incomodar a los otros, ni a mí mismo/a, así como para ejercer nuestros propios derechos sin violar los derechos de los demás. Esto se logra a través de mucho entrenamiento para tener la capacidad verbal de resolver los problemas que se nos presentan. Para ello es indispensable saber que tenemos que tener un gran manejo emocional, calma, prudencia, un adecuado manejo del lenguaje no verbal (vista, movimientos, contacto físico, gesticulaciones, etc.) así como hablar siempre en primera persona (“yo pienso”, “yo creo”, “yo opino”, “yo siento”, etc.).

Claro que se requiere mucho más para poder hablar con seres extraterrestres (ya que estamos hablando de culturas literalmente de otros planetas), sin embargo, estas claves son base para poder llegar a tener una comunicación funcional.

¿Consideras que dentro de tu propia especie eres capaz de tener una comunicación funcional?

Imagen de portada: world wide web